*De forma arbitraria y temeraria, el alcalde Marcos Romero, encarcelo a Aquileo Santos, represéntate de casilla del PRI, “ven moros con tranchete”
*En este momento goza de libertad, y se presume que serán demandados por abuso de autoridad y otros delitos punibles
Por: María Elena Mancilla Gómez
Papantla, Veracruz.- Después de la una de la tarde, la escolta del presidente municipal Marcos Romero Sánchez, de forma arbitraria y temeraria, ordeno detener a Aquileo Santos Olvera, representante del PRI de la casilla B, de la sección 2957 de la calle Río Cazones s/n de Morgadal de Papantla, “ven moros con tranchete”, es decir que olfateo que compraban votos, cuando la dinastía Romero Sánchez, presumió que en la campaña de la perredista, Erika Romero Copta, candidata a la diputación federal, invertiría arriba de los 30 millones de pesos.
El nerviosismo obedece, es que la abanderada del PRD, Erika Romero, no ha podido impactar a la sociedad del distrito, se antepone el lazo sanguíneo que la une con el alcalde Marcos Romero, ni las lagrimas que ha derramado, porque según su niña de casi 5 años la extraña, eso no impresiono a las mujeres que se encontraban en una reunión en días pasados en el “Auditorio Papantequita”, de la calle Tuxpan, ni en “La Casa” que se localiza a un costado de “Súper Che”, es motivo de desesperación.
Los electores, hablan que habrá voto duro contra Erika Romero, sobrina del presidente municipal, Marcos Romero, se antepone la falta de obra pública que prometió durante su campaña, no saben donde están los 400 millones de pesos que la Federación y el Gobierno Estatal envió para la infraestructura social del año pasado y el actual, solo se platica por los pasillos del palacio municipal, del nepotismo y una imperante corrupción, dicen que como no conoce de administración ni de Relaciones Humanas, contrato al ex taquero, Mariano Romero, el sobrino incomodo del munícipe, el que atiende de forma petulante a los empresario del ramo de la construcción, quien es poder tras el trono, el que da la última palabra.
La abanderada del PRD, Erika Romero, también se enfrentara a la rabia de la sociedad civil, por el caso de 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa, que desaparecieron en el municipio de Iguala, en el estado de Guerrero, a unos 200 kilómetros de la capital del país. Los estudiantes, que se preparaban para ser profesores rurales, fueron atacados por la policía municipal, en donde gobernaba un alcalde del PRD, José Luis Abarca Velázquez, los jóvenes participaron en una protesta y tuvieron un enfrentamiento con la policía municipal, que los detuvo y los entregó al cártel del narcotráfico “Guerreros Unidos”, el cual opera en este estado del sur de México, un sanguinario cártel nacido hace apenas 3 años.
Esa reprobable estrategias, trata de aplicarlas el ex cortador de naranjas, Marcos Romero, con los militantes del tricolor, como sucedió con el representante de casilla, que hasta después de varias horas lo soltó la policía municipal, no se sabe donde lo escondió o si lo torturaron, sin embargo, el hecho será denunciado ante la Unidad Integral de Procuración de Justicia, ante esa lamentable situación, amenazo el delegado distrital, Rogelio Abrego Hernández de denunciarlo por abuso de autoridad y otros delitos que se le imputan.
Mientras tanto, la elección se pone candente porque está en juego las auditorias que podrían practicarle la ASF, al poderoso millonario Marcos Romero, y como decía Chapulín Colorado “ahora quien podrá salvarme”, pues solo el triunfo de la sobrina Erika Romero, puesto que utilizaría el fuero para arroparlo o encubrirlo.
